Cuando se acerca el final de...

Hoy es el día 29 y se está acercando el final del reto #30díasdeblog.

Empecé este reto comentando en Reto #30díasdeblog - Día 1 que era más que nada un reto #Personal que me trazaba yo mismo y una razón para motivarme a escribir en mi blog. Confieso que el reto ha sido sumamente complejo, ya que compaginar el escribir cada día un artículo diferente y de una temática diferente cada día con mi vida cotidiana, mi familia, mi trabajo, mis proyectos extracurriculares e incluso una mudanza (sin Internet en casa) no ha sido una tarea nada fácil.

A un día del final del reto, y con la temática #Personal, quiero compartir sobre algo que desde hace un par de años he vivido de forma muy marcada en distintos aspectos de mi vida, "Cuando se acerca el final de...", una era, un período en tu vida, un trabajo, una experiencia, un reto, cualquiera que sea la situación.

Cuando está llegando el final de algo, la mayoría de las veces lo más común es que nos sintamos tristes y tengamos muchos momentos de reflexión, reflexión en aquello que se acaba, aquello que no tendremos o veremos más y de la misma forma nos cuesta ver más allá de lo que sentimos en el presente sin considerar que cuando llega el final de ese "algo", también significa que es el inicio de "algo más", una nueva era, una nueva aventura, un nuevo y diferente período en tu vida, un nuevo trabajo, una nueva experiencia, un nuevo reto.

A veces esos finales suceden porque así es la vida, existen inicios y existen finales, la misma vida para todos tendrá su final y es inevitable, pero no es de esos finales que quiero compartir. Quiero enfocarme en otro tipo de finales, los finales que se deben a decisiones que tomamos, proyectos que planificamos o retos que nos trazamos. Cualquiera que sea ese "algo", termina porque nosotros mismos decidimos el inicio y de alguna manera también el final aunque en ocasiones no seamos consientes de ello.

Para que entiendan a que me refiero voy a listar algunos de esos finales que he vivido recientemente:

• El final de una vida establecida en mi país, para saltar por primera vez a la aventura de vivir en otro.
• En ese mismo momento, el final de un trabajo estable, bien pagado y seguro.
• El final de un periodo de estudio de un Master online, donde hice conexiones y amigos.
• El final de un periodo de vivir en un lugar que me brindó a mi, a mi esposa y a mis perritos, todo lo necesario y la seguridad que necesitábamos cuando llegamos a España (hace casi 2 años), incluso nos mantuvo cómodos y protegidos durante el confinamiento por el covid-19.
• El final de este reto #30díasdeblog.

Algunas podrían parecer trivialidades para quien esta leyendo esto, pero cada una de ellas han significado algo importante para mi. Así mismo habrán algunos finales en tu vida que a lo mejor nadie entiende porqué te ves afectado por ellos, pero somos cada uno seres diferentes en nuestra propia individualidad y no todo tiene que hacer sentido para todos.

En todos estos finales que he vivido, han existido algunos componentes en común en ellos:

• La decisión de finalizar, terminar, dejar de hacer ese "algo" y del cómo hacerlo.
• La tristeza al saber que ese "algo" ya no estará (antes de que finalice) y que continua cuando ya aquello no está más.
• La incertidumbre, y a veces temor, de lo que viene después del final.
• El miedo de que no llegue ese nuevo "algo", el nuevo comienzo.
• Pero el factor en común más importante es que cada uno de esos finales ha traído consigo un nuevo comienzo, una nueva oportunidad en mi vida y en la de mi esposa y una nueva manera de agradecer las oportunidades que Dios nos pone enfrente.

... cada uno de esos finales ha traído consigo un nuevo comienzo, una nueva oportunidad ...

Y es adonde quería llegar, a veces nos quedamos en los primeros 4 factores y olvidamos el 5; y como dicen en el fútbol, en una goleada, no hay 5to malo😁⚽.

Si te encuentras en unos de esos momentos de finales, esperados o inesperados, acuérdate del famoso refrán "Cuando una puerta se cierra, otra mejor se abre", yo lo he vivido en carne propia.

Este refrán plantea la metáfora de que la vida es una habitación de muchas puertas y sugiere que ante cada posibilidad que se cierra, finaliza, perdemos, etc. se abre siempre una oportunidad o alternativa mejor que puede brindar un giro inesperado a los planes que nos hemos trazado. Siempre que exista voluntad y capacidad de atención, es posible replantear la vida en una dirección más estimulante.

Esto va de la mano con lo que comenté en, VUCA, de un contexto negativo a una organización positiva - Día 16, sobre como las emociones, ya sean positivas o negativas guían nuestra vida y que es casi imposible dejarlas de lado.

Cuando vivimos estos finales, tenemos la oportunidad de enfocar nuestros pensamientos ya sea en aquellas circunstancias negativas, lo que ya no voy a tener, lo que no podré hacer más o en las positivas, las cosas nuevas que vendrán, las nuevas oportunidades. Hoy por ejemplo me pasó, que dejando el apartamento en el que viví por casi 2 años, me quedé apreciando la vista desde el balcón y en un momento de emoción le comenté mi esposa, cuando me notó triste, que estaba pensando que sería la última vez que tendría la oportunidad de apreciarla. Por un momento me olvidé del nuevo lugar en el que viviremos nuevas experiencias y donde tendremos la oportunidad de crear nuevos recuerdos.

Con esto no quiero decir que está mal sentirse triste por ese "algo" que finaliza o que ya no tendremos o podremos hacer, si no que pensemos cuanto tiempo y esfuerzo dedicamos a esos aspectos negativos en vez de todo ese nuevo "algo" que nos espera y que nos traerá tantas cosas buenas como nosotros mismos nos esforcemos por tener, los aspectos positivos.

Tu decides si enfocarte en lo positivo o en lo negativo, y si ser más o menos feliz ante el final de ese "algo".

Recuerda no desesperar y estar atento a las oportunidades que se manifiestan a tu alrededor y que...

"Cuando una puerta se cierra, otra mejor se abre"

Y así, completo el día 29 del reto #30díasdeblog👨‍💻.

Un abrazo!

P. D.: Este artículo tiene 1090 palabras.