TIEMPO DE PAREJA DIARIO

Una de las claves de cualquier matrimonio y una de las maneras más efectivas de conocer las necesidades de tu pareja, es a través de la comunicación. Por esta razón, debemos poner mucha atención en cómo está nuestro proceso comunicativo. 

No hablamos sólo de la comunicación trivial que la mayoría podemos tener a diario con nuestras parejas, cuando preguntamos cosas cómo «¿Qué tal el tráfico?«, «¿Cómo te fue en el trabajo?«, «¿Cómo les fue a los niños en el cole?«, ya que, para que un matrimonio sea exitoso y duradero de verdad, necesitamos desarrollar una comunicación más profunda.

Una comunicación que nos haga sentir cómodos para expresar lo que sentimos y lo que necesitamos, pero que también nos haga estar atentos a lo que siente y necesita nuestra pareja. Una comunicación que nos ayude a enfrentar los conflictos, a buscar soluciones y a llegar a acuerdos. Así es como podemos construir una relación sólida y duradera.

Para facilitar la mejora de vuestro proceso comunicativo, queremos compartir con vosotros la práctica del Tiempo de Pareja Diario.

¿Qué es el Tiempo de Pareja Diario?

El “Tiempo de Pareja Diario” es una manera de establecer una dinámica entre vosotros que os lleve a mejorar vuestra comunicación, pero os advertimos desde ya, como todo en el matrimonio, esta práctica requiere de un fuerte compromiso de ambos para que realmente cumpla su cometido.

El “Tiempo de Pareja Diario” consiste en reservar un espacio de tiempo todos los días de manera intencional, para comunicarnos profunda e íntimamente como pareja. Para matrimonios con hijos, donde las conversaciones giran principalmente en torno a la familia, los niños, los problemas de la casa, entre otros temas cotidianos, pero ajenos a la relación en pareja, se debe procurar que el tiempo de pareja diario sea para conversar solamente sobre los temas que afectan directamente la relación entre ambos, recordando en todo momento, que lo que buscamos mejorar el hábito de la comunicación entre los dos.

El tiempo de pareja diario requiere de unas simples reglas que deben seguirse para lograr el objetivo principal, que es crear el hábito de comunicarnos mejor:

• Estar comprometidos – Esta actividad requiere constancia e interés, por lo que el compromiso de ambos es muy importante.
• Reservar al menos 15 minutos al día (como mínimo recomendado) – Aunque seamos de los que decimos continuamente "no tengo tiempo", todos tenemos al menos 15 minutos al día que podemos dedicarle a nuestra pareja.
• Estar de pie cara a cara – Queremos tener una comunicación efectiva y no hay nada más efectivo que poder mirarnos a la cara cuando conversamos en intimidad.
• Fijar una hora y un lugar – Para crear de nuestra comunicación hábito, lo mejor es que el tiempo diario en pareja se lleve a cabo en el mismo lugar y a la misma hora todos los días, por ejemplo, en vuestra habitación a primera hora de la mañana, o a las 9:00 de la noche (cuando los niños ya se han ido a dormir).

¿Cómo hacemos el Tiempo de Pareja Diario?

Ya que conocéis las reglas y os habéis comprometido a seguirlas, debéis conocer cómo estructurar la conversación para que sea efectiva y que en el tiempo que habéis reservado realmente podáis comunicaros. Para esto podéis usar algunas preguntas que os ayudarán a guiar la conversación todos los días, puede que a medida que vuestra comunicación va mejorando alguna de ellas no haya que contestarlas un día, pero, aunque ese sea el caso siempre debéis tenerlas presentes:

• ¿Hay algo que le quieras decir a tu pareja? – Aprovecha para comunicarle a tu pareja cómo te sientes, qué sientes por ella, ¿algo te ha molestado?, ¿tienes alguna necesidad que transmitirle?, etc., por mencionar algunos ejemplos.
• ¿Qué hicistéis/pasó ayer que aún no le has comentado? – Esto os ayudará a mantener la comunicación abierta y transparente, mejorando la confianza entre vosotros.
• ¿Qué pensáis hacer durante el día? – Coméntale a tu pareja si tienes algún plan o algo que hacer en el día a parte del trabajo, ¿has planeado una salida juntos?, ¿alguna actividad extracurricular?, ¿una reunión con amigos?, etc.
• ¿Qué tal si oramos juntos? – Tomen unos minutos para orar en pareja, por las actividades del día, por vuestras necesidades individuales o conjuntas.

Ya que conocéis el tiempo de pareja diario, sus reglas y cómo os puede ayudar a cultivar una conversación más íntima y profunda, ¿os animáis a practicarlo?

Si decidís hacerlo, si os ayuda, o no, agradecemos vuestros testimonios y comentarios al respecto.

Marvin y Carol